Ivan Galamian; pedagogía

Itzhak Perlman define el sistema de enseñanza de Ivan Galamian como ingenioso y lógico.
Los alumnos de Galamian se caracterizaron por ser músicos de un alto nivel técnico y una gran personalidad artística, lo que demuestra que su método de enseñanza correcponde a un gran pedagogo.

En su libro "Principios para tocar y enseñar el violín", nos habla de las principales deficiencias en las que suele caer la enseñanza, como:
  • Aplicar reglas rígidas: no usar a los alumnos para glorificar las normas. El violín es un arte, y como tal no puede basarse en reglas inamovibles, sino en unos principios generales lo bastante amplios para cubrir problemas generales y lo suficientemente flexibles para ser aplicados casos particulares
  • Lo “correcto” varía con cada alumno, ya que es lo que funciona de manera eficiente para él. La verdadera función del profesor es hacer que el alumno se sienta a gusto con su instrumento.
  • Si una parte de la técnica cambia (por ejemplo la manera de coger el arco), las otras partes implicadas en esa técnica (mano y brazo) deben cambiar también y ajustarse de manera orgánica en un nuevo equilibrio. El profesor debe estar preparado para hacer todo tipo de ajustes adaptados a cada alumno.
  • Lo más importante en el violín no son los movimientos físicos, sino el control mental que se tiene sobre ellos. La verdadera clave de precisión y facilidad es encontrar la relación entre mente y músculos, entre secuencias mentales y respuestas físicas tan rápido y preciso como sea posible.

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