Vuelvo al blog con este vídeo de Nicola Benedetti que nos habla de manera clara, amena y divertida de la base técnica del violín desde la consciencia corporal y la adaptación al propio cuerpo. Difícilmente encontrareis un video mejor sobre este tema!
Clases particulares - Método Suzuki - Teoría musical - Conciertos - Recitales
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Base del violín y consciencia corporal
Hola a tod@s!
Vuelvo al blog con este vídeo de Nicola Benedetti que nos habla de manera clara, amena y divertida de la base técnica del violín desde la consciencia corporal y la adaptación al propio cuerpo. Difícilmente encontrareis un video mejor sobre este tema!
Vuelvo al blog con este vídeo de Nicola Benedetti que nos habla de manera clara, amena y divertida de la base técnica del violín desde la consciencia corporal y la adaptación al propio cuerpo. Difícilmente encontrareis un video mejor sobre este tema!
Tocar el violín; expresarse musicalmente
Muchas veces cuando los alumn@s comienzan a tocar el violín pueden imaginarse fácilmente manteniendo la posición de arco y violín o leyendo una partitura. Sin embargo es una gran sorpresa para la mayoría descubrir la capacidad que hay en ellos de hacer música.
Con un material tan modesto como cuatro notas (las cuatro cuerdas al aire del violín) y el acompañamiento de un piano podemos interpretar una verdadera pieza musical, y sorprendemos a nosotros mismos haciendo música. Este momento es uno de mis preferidos; ojos brillantes de emoción, sonrisas, ganas de seguir tocando y descubriendo. Y creo que en gran parte esta reacción se debe a un autodescubrimiento, a algo que ha emergido, algo en esencia conocido pero en una nueva forma; la música.
Y es que a veces una sucesión de notas que forman una melodía o un conjunto de notas que forman una armonía nos transportan a una sensación o a una vivencia muy concreta, y redescubrimos rincones en nosotros mismos olvidados, lo que nos da una gran alegría.

Y esta exploración continúa cuando trabajamos el sonido y unimos esa experiencia sonora a la experiencia corporal; sí, tocamos el violín con nuestro cuerpo, y si está relajado y unido a nuestra mente también se expresa y le escuchamos.
Por todo ello tocar el violín no sólo es un ejercicio de desarrollo intelectual, sino toda una experiencia global que nos invita a conocernos y expresarnos de manera muy intensa y concreta, en un tiempo totalmente presente y fugaz.
Es una experiencia vital y creativa que en mi opinión merece ser explorada, al menos una vez en la vida!
Con un material tan modesto como cuatro notas (las cuatro cuerdas al aire del violín) y el acompañamiento de un piano podemos interpretar una verdadera pieza musical, y sorprendemos a nosotros mismos haciendo música. Este momento es uno de mis preferidos; ojos brillantes de emoción, sonrisas, ganas de seguir tocando y descubriendo. Y creo que en gran parte esta reacción se debe a un autodescubrimiento, a algo que ha emergido, algo en esencia conocido pero en una nueva forma; la música.
Y es que a veces una sucesión de notas que forman una melodía o un conjunto de notas que forman una armonía nos transportan a una sensación o a una vivencia muy concreta, y redescubrimos rincones en nosotros mismos olvidados, lo que nos da una gran alegría.
Y esta exploración continúa cuando trabajamos el sonido y unimos esa experiencia sonora a la experiencia corporal; sí, tocamos el violín con nuestro cuerpo, y si está relajado y unido a nuestra mente también se expresa y le escuchamos.
Por todo ello tocar el violín no sólo es un ejercicio de desarrollo intelectual, sino toda una experiencia global que nos invita a conocernos y expresarnos de manera muy intensa y concreta, en un tiempo totalmente presente y fugaz.
Es una experiencia vital y creativa que en mi opinión merece ser explorada, al menos una vez en la vida!
Learn by doing
Aunque no directamente relacionado con el violín, esta entrevista en el programa "Terricoles" de Btv a Ricard Huguet nos muestra muchos de los puntos en los que se basa las enseñanzas del método Suzuki.
Conozcamos más de cerca cómo se utilizan diferentes recursos basados en el "aprender haciendo" para mejorar la productividad y el trabajo en equipo, y cómo se relacionan con la filosofía del método Suzuki en beeslab:
- basar la evolución en la innovación. Se trata de estar en una continua adaptación a entornos cambiantes, en contacto con la realidad.
En el método Suzuki este punto se refleja en la continua adaptación de contenidos y recursos a cada alumno, a cada estado evolutivo, y a cada realidad de grupo. No se trata sólo de evolucionar individualmente de manera creativa, sino también de trabajar en equipo y conocer la realidad de otros alumnos. Se trata de dar importancia no sólo a la cantidad de piezas que somos capaces de tocar, sino también a escuchar a los otros y aprender de ellos.
- tratar de resolver de forma creativa e innovadora diferentes retos.
Desde el método Suzuki no hay dos alumnos que aprendan ni a los que se les enseñe igual. Con la guía adecuada, cada persona, cada alumno, puede aprender a desarrollar recursos personales y originales para resolver problemas.
- no tener miedo a equivocarse.
El error es un paso más del aprendizaje, y una parte más de él que nos lleva a evolucionar. De hecho la palabra "error" o "estar mal" no existen en el vocabulario de enseñanza Suzuki. Existe la mentalidad positiva de reconocer que algo no funciona y a partir de esta aceptación y reconocimiento decimos "vamos a hacer esto", o "prueba esto otro", o nos fijamos en otra cosa que sí que es positiva para después abordar el punto que se puede mejorar o no funciona. El reconocimiento simple de las cosas implica no tener miedo al error, no tener miedo a adaptarse a la realidad y a evolucionar viviendo en ella.
- desarrollar una metodología en la que todo el mundo tenga derecho a expresar sus ideas en igualdad.
Esta idea es uno de los principales pilares de las enseñanzas que desarrollamos en beeslab.
Una vez establecido un respeto por el trabajo del profesor como guía en el aprendizaje de familias y alumnos, la relación entre nosotros es de igualdad. Cada alumno y familia nos enseña una nueva visión y adaptación del conocimiento, de los contenidos. Su participación y observaciones del proceso hace posible que cada año sea diferente y mejor que el anterior. Esto revierte directamente en la calidad en la enseñanza y atención que les podemos proporcionar.
- "se aprende más con una hora de juego que con un año de conversación" Platón.
Con el juego las jerarquías y los resultados a corto plazo desaparecen; simplemente creamos. El papel del profesor es facilitar y guiar el proceso, ser descubridores de lo que realmente cada uno puede aportar.
- establecer unos principios guía que nos ayuden en la toma de decisiones.
Siempre nos encontraremos situaciones y problemas que no hemos podido prever, pero si tenemos unos principios y unos recursos bien fundamentados podremos hacerlos frente. Yo añadiría que si además estos principio y recursos los hemos incorporado y adaptado como nuestros los resolveremos de manera original y creativa, fluyendo con la realidad y enriqueciendo nuestro entorno.
- "somos capaces de retener el 10% de lo que leemos, el 20% de lo que escuchamos, el 30% de lo que vemos y el 90% de lo que hacemos". A demás experimentar es mucho más divertido que teorizar.
Desde mi perspectiva como profesora Suzuki, lo que más me ha enriquecido es poder conocer el origen de cómo aprendemos desde la primera infancia. Y este origen y manera de enseñar lo perdemos cuando se trata de enseñar y compartir conocimientos con los adultos. A un niño de tres años no se nos ocurriría explicarle con palabras cómo coger un violín; especificamos acciones y ejercicios concretos con los que pueden experimentar. ¿y porqué no hacerlo así con los adultos?. Obviamente después se puede completar el proceso con información adicional, pero esa experiencia concreta es la que ha hecho participar más sentidos y por tanto más partes del cerebro; por eso hemos fijado más información; porque nos ha llegado por muchos más canales.
- ¿cómo puedes producir en un lugar en que no estás satisfecho?
Es una realidad escolar y laboral alarmante. Pero tener recursos individuales que nos permitan crear incluso en los entornos más yernos es lo que nos dará una verdadera felicidad haciendo nuestro trabajo, lo que hará que mostremos nuestro verdadero talento y nos permita evolucionar hacia mejores trabajos.
Y esto se aprende desde la edad temprana, en nuestro caso a partir del método Suzuki, el valorar la calidad de lo que aportamos.
- las empresas en la actualidad no buscan "al mejor", buscan personas que sepan trabajar en equipo, que sepan resolver problemas, que sepan comunicar y analizar datos.
Estas habilidades no se enseñan en la universidad, sino que se han de promover en todas las actividades desde la edad temprana. Desde nuestro pequeño rincón de enseñanza trabajamos todos estos valores transversales en cada clase, y les damos la misma importancia que a tocar el violín. De hecho pensamos que el hacer música es uno de los mejores medios para desarrollarlos, ya que además les estamos enseñando un medio de expresión creativo, y cultivando el amor por la expresión artística, por el arte.
Conozcamos más de cerca cómo se utilizan diferentes recursos basados en el "aprender haciendo" para mejorar la productividad y el trabajo en equipo, y cómo se relacionan con la filosofía del método Suzuki en beeslab:
- basar la evolución en la innovación. Se trata de estar en una continua adaptación a entornos cambiantes, en contacto con la realidad.
En el método Suzuki este punto se refleja en la continua adaptación de contenidos y recursos a cada alumno, a cada estado evolutivo, y a cada realidad de grupo. No se trata sólo de evolucionar individualmente de manera creativa, sino también de trabajar en equipo y conocer la realidad de otros alumnos. Se trata de dar importancia no sólo a la cantidad de piezas que somos capaces de tocar, sino también a escuchar a los otros y aprender de ellos.
- tratar de resolver de forma creativa e innovadora diferentes retos.
Desde el método Suzuki no hay dos alumnos que aprendan ni a los que se les enseñe igual. Con la guía adecuada, cada persona, cada alumno, puede aprender a desarrollar recursos personales y originales para resolver problemas.
- no tener miedo a equivocarse.
El error es un paso más del aprendizaje, y una parte más de él que nos lleva a evolucionar. De hecho la palabra "error" o "estar mal" no existen en el vocabulario de enseñanza Suzuki. Existe la mentalidad positiva de reconocer que algo no funciona y a partir de esta aceptación y reconocimiento decimos "vamos a hacer esto", o "prueba esto otro", o nos fijamos en otra cosa que sí que es positiva para después abordar el punto que se puede mejorar o no funciona. El reconocimiento simple de las cosas implica no tener miedo al error, no tener miedo a adaptarse a la realidad y a evolucionar viviendo en ella.
- desarrollar una metodología en la que todo el mundo tenga derecho a expresar sus ideas en igualdad.
Esta idea es uno de los principales pilares de las enseñanzas que desarrollamos en beeslab.
Una vez establecido un respeto por el trabajo del profesor como guía en el aprendizaje de familias y alumnos, la relación entre nosotros es de igualdad. Cada alumno y familia nos enseña una nueva visión y adaptación del conocimiento, de los contenidos. Su participación y observaciones del proceso hace posible que cada año sea diferente y mejor que el anterior. Esto revierte directamente en la calidad en la enseñanza y atención que les podemos proporcionar.
- "se aprende más con una hora de juego que con un año de conversación" Platón.
Con el juego las jerarquías y los resultados a corto plazo desaparecen; simplemente creamos. El papel del profesor es facilitar y guiar el proceso, ser descubridores de lo que realmente cada uno puede aportar.
- establecer unos principios guía que nos ayuden en la toma de decisiones.
Siempre nos encontraremos situaciones y problemas que no hemos podido prever, pero si tenemos unos principios y unos recursos bien fundamentados podremos hacerlos frente. Yo añadiría que si además estos principio y recursos los hemos incorporado y adaptado como nuestros los resolveremos de manera original y creativa, fluyendo con la realidad y enriqueciendo nuestro entorno.
- "somos capaces de retener el 10% de lo que leemos, el 20% de lo que escuchamos, el 30% de lo que vemos y el 90% de lo que hacemos". A demás experimentar es mucho más divertido que teorizar.
Desde mi perspectiva como profesora Suzuki, lo que más me ha enriquecido es poder conocer el origen de cómo aprendemos desde la primera infancia. Y este origen y manera de enseñar lo perdemos cuando se trata de enseñar y compartir conocimientos con los adultos. A un niño de tres años no se nos ocurriría explicarle con palabras cómo coger un violín; especificamos acciones y ejercicios concretos con los que pueden experimentar. ¿y porqué no hacerlo así con los adultos?. Obviamente después se puede completar el proceso con información adicional, pero esa experiencia concreta es la que ha hecho participar más sentidos y por tanto más partes del cerebro; por eso hemos fijado más información; porque nos ha llegado por muchos más canales.
- ¿cómo puedes producir en un lugar en que no estás satisfecho?
Es una realidad escolar y laboral alarmante. Pero tener recursos individuales que nos permitan crear incluso en los entornos más yernos es lo que nos dará una verdadera felicidad haciendo nuestro trabajo, lo que hará que mostremos nuestro verdadero talento y nos permita evolucionar hacia mejores trabajos.
Y esto se aprende desde la edad temprana, en nuestro caso a partir del método Suzuki, el valorar la calidad de lo que aportamos.
- las empresas en la actualidad no buscan "al mejor", buscan personas que sepan trabajar en equipo, que sepan resolver problemas, que sepan comunicar y analizar datos.
Estas habilidades no se enseñan en la universidad, sino que se han de promover en todas las actividades desde la edad temprana. Desde nuestro pequeño rincón de enseñanza trabajamos todos estos valores transversales en cada clase, y les damos la misma importancia que a tocar el violín. De hecho pensamos que el hacer música es uno de los mejores medios para desarrollarlos, ya que además les estamos enseñando un medio de expresión creativo, y cultivando el amor por la expresión artística, por el arte.
Consejos útiles para cambiar cuerdas
Cambiar una o varias cuerdas es muy fácil siempre que tengamos en cuenta algunas consideraciones importantes. En primer lugar, si queremos cambiar todas las cuerdas del violín es muy importante que no quitemos las que ya estaban puestas todas a la vez, ya que:
- el puente se mantiene en su posición única y exclusivamente por la presión que ejercen las cuerdas sobre él. Por eso si las quitamos todas caerá y podrá incluso dañar el violín.
- el alma también se mantiene en su posición entre tapa fondo por dicha presión, y es muy posible que
también caiga.
Por eso como mucho quita dos cuerdas a la vez y preferiblemante que no sean consecutivas (Sol y La o Re y Mi).
A continuación detallo los pasos a seguir para cambiar una cuerda.
1. Sujeta bien y cómodamente el violín en una posición que te permita trabajar. Yo lo suelo coger así:
2. Retira la cuerda antigua. Primero destensaremos la clavija girándola hacia nosostros y estirando la cuerda con cuidado hasta sacarla de la clavija. Después la desenganchamos del cordal.
En el caso de que la cuerda se haya roto es el mismo procedimiento; simplemente ten cuidado de no hacerte daño en la zona de cuerda rota.
3. Poner la cuerda nueva. Primero miraremos que tipo de terminación tiene la cuerda; si de bola (la más frecuente) o de lazo (algunos modelos de cuerda Mi para adaptarla al tensor). En el caso de las cuerdas de tripa tendremos que hacer un nudo que sustituya a este final para engancharlo al cordal.
Cogeremos la cuerda por el lado sin terminación y la pasaremos, como si se tratase de enhebrar una aguja, por el agujero de la clavija, dejando que sobresalga un poco.
A continuación iremos girando la clavija en dirección a la voluta del violín vigilando que la cuerda se vaya enrrollando lo más pegada posible.
En el caso de que haya muy poco espacio entre clavijero y cuerda, enrolla una o dos vueltas hacia el centro del clavijero y después continúa con normalidad hacia el clavijero.
Cuando hayas dado ya unas vueltas a la cuerda y la longitud sea ligeramente mayor a la que tendrá la cuerda colocada en el cordal coloca el extremo de la bola.
Ves tensando poco a poco la cuerda y comprueba de vez en cuando que el puente está recto, puesto que es frecuente que se vaya inclinando hacia el batedor al girar las clavijas.
Finalmente comprueba la afinación con un afinador o el diapasón y ten en cuenta que la cuerda tardará unos días en estabilizar la afinación al estar sometida por primera vez a su tensión. Comprueba mientras estudias que no se haya desafinado demasiado.
Por eso es muy recomendable, si no te corre demasiada prisa, que cambies las cuerdas de una en una, porque si no estudiar puede convertirse en un aunténtico quebradero de cabeza!
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